Luz de noche con los inuits

Describiendo algo ...

Existe un bello pueblo en Alaska llamado "La última puerta", en él conviven extraordinariamente un puñado de gente blanca americana y las últimas generaciones de inuits; mejor conocidos y mal llamados esquimales, termino que significa "comedor de carne cruda", todo lo contrario, la palabra inuit, cargada de sabiduría significa "gente".

Cada invierno sus días los ven transformados en noches eternas. La oscuridad sólo los abandona al llegar la próxima primavera; mientras tanto procuran hacer de sus relaciones sociales más fraternas e importantes: conviven entre si, como familias y amigos antes de irse a casa y embargarse en el sueño para despertar en un día que sigue siendo noche. Parte de esa convivencia se halla simbolicamente representada en un festival comunitario, el cual tiene la intención de gratificar al invierno cruento y éste no inunde sus corazones con la temerosa tristeza.

El festival es llamado "Luz de noche" y consiste en pasar un día completo llenando el pueblo con faroles. Todos los miembros de la comunidad participan: niños, jóvenes y ancianos.

Desde primera hora comienzan a colocar en todas sus pequeñas y pintorescas calles, distintos farolitos de diversos tamaños y colores, su única condición es que estos den mucha luz; los hay con velas, con focos de electricidad y con lamparas de gas.

Cuando han terminado su labor en comunidad, los faroles son encendidos y es en ese momento cuando el pueblo se llena de esplendorosa luz, misma que enaltece de alegría el alma de cada uno de sus habitantes.

Entonces, frente a toda la comunidad, habla la persona que ha sido escogida para pronunciar el discurso que año con año se expresa:

"Cada año sentimos que la noche nunca terminará, en ocasiones creemos que la noche eterna sólo nos dejará su velo de tristeza sobre nuestros pensamientos y corazones, pero desde hace siglos comprendimos que la oscuridad es pasajera.

Hoy, como muchas veces lo hemos venido haciendo, colocamos los faroles luminosos en todo el pueblo de "la última puerta" para darle la bienvenida a la luz que siempre se mantiene dentro de cada uno de nosotros.

Por lo tanto cada farol es la representación del alma de aquellos que vivieron, vivimos y viviremos en nuestro pueblo pues somos como estrellas titilantes en la enorme oscuridad, porque ésta sólo nos visita por una larga temporada, en la cual aprendemos a ser mejores abuelos, padres e hijos; mejores hermanos, amigos, esposos y vecinos; mejores humanos con todos los seres vivos que nos rodean.

Cuando parece que la infinita negrura albergara por siempre en el tiempo y en el espacio, el milagroso amor del Todopoderoso se hace presente, ahí, en el amor, en la luz paternal de la solidaridad, de la bella sonrisa que regalamos aquienes están a nuestro costado incondicionalmente. Hoy la noche es totalmente oscura pero hemos prendido la luz del amor. Ahora tomemos el banquete para dar las gracias, recordando que la oscuridad sólo es pasajera"

Cuento "Luz de una noche fría"

DR AMSX